Crean robot controlado por el cerebro para ayudar a discapacitados
 Desde el jueves se realiza el Encuentro Mundial de Ciencias, organizado por la Asociación Americana para el Avance de la Ciencia (AAAS), evento que reúne en Washington, EEUU, a científicos y premios Nobel y donde se darán a conocer las últimas investigaciones en áreas como neurociencia, salud, astronomía o robótica.
Y precisamente la robótica dio el puntapié inicial de este encuentro con la presentación de un robot que es controlado mediante los pensamientos y que tiene el objetivo de ayudar a pacientes con diversos tipos de discapacidad. Este opera mediante la interfaz cerebro-computador (Brain Computer Interface, BCI), la comunicación entre las funciones mentales o cognitivas del cerebro cuyas señales eléctricas son captadas, procesadas y clasificadas por un computador para comunicarse con un medio externo. En este caso, darle órdenes al robot.
Robotino, un notebook sobre un soporte con ruedas, fue creado por el equipo que lidera el doctor en Ciencias Informáticas José del R. Millán, de la Escuela Politécnica Federal de Lausana, en Suiza.
¿Cómo funciona? "El paciente debe utilizar una gorra con electrodos que se adhieren a su cuero cabelludo, mediante los cuales se mide la actividad del cerebro con un sistema de adquisición de las señales cerebrales. Se digitalizan estas ondas y se envían a un computador conectado a los cables de los electrodos junto al paciente. Este PC se encarga de analizar y decodificar la intención de la persona y en ese momento se envía la orden al robot para que la ejecute", explicó Millán a La Tercera.
Mediante los pensamientos, el androide podrá obedecer las órdenes y moverse en sólo tres direcciones: hacia adelante, izquierda o derecha. La conexión entre el computador y el robot es inalámbrica o Wi-Fi y puede desplazarse hasta más de 200 metros, dependiendo de la capacidad del router.
Compartir en familia
Este aparato fue creado especialmente para permitirles a las personas restringidas de movilidad o que no pueden moverse de la cama, participar de las actividades familiares o sociales. Robotino puede movilizarse, por ejemplo, al comedor durante un almuerzo para participar de un cumpleaños. Como está equipado por una cámara web y una pantalla, el paciente ve lo mismo que el robot y la familia lo ve a él. De esta forma se produce la interacción de forma remota. "Queremos asegurarnos de que este prototipo efectivamente mejore la calidad de vida de los pacientes", explica Michele Tavella, estudiante de doctorado y parte del equipo.
Los científicos también trabajan en una silla de ruedas que opera mediante el cerebro con el mismo sistema que Robotino.
Hasta ahora, este proyecto se ha implementado en 20 pacientes en Suiza con diversos problemas motores, como paraplejias, distrofia muscular y esclerosis lateral amiotrófica. El equipo espera que se pueda masificar en 10 años más.
Fuente: Andrea Obaid desde Washington para La Tercera
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